martes, 27 de diciembre de 2011

Bautismo

Tardíamente, como es mi costumbre, he decidido bautizarme. No bautizarme como artista, porque como artista yo venía bautizada desde antes de nacer y no tuve opción de negarme (afortunadamente); tampoco hablo de bautizarme en una iglesia (de manera igualmente tardía fui bautizada en la iglesia católica, a los 5 años, aunque debo decirles que a los 5 años todavía no se comprende que es una iglesia y un bautismo). A los 25 años, con plena conciencia y seguridad, me bautizo yo misma bajo el seudónimo de Clodìn. No quiero que como a Rodin le llamaban “Rodán” a mi me llamen "Clodàn" (parecer extranjera para ganar aprobación social no es una de mis aspiraciones). Mi nombre será sencillamente Clodìn. Suena a lavalozas, lo se, pero lo cargaré con perseverancia y orgullo en el tiempo. Y cuando mi tiempo se acabe lo llevará mi pintura, aun si sólo lo saben las arañas de un perdido ático.

viernes, 18 de marzo de 2011

Y tú Claudia… ¿Por qué pintas?

Consciente de mi tiempo finito, de la probabilidad de que cuando resucite ya no tenga manos, o de que en otra vida no encuentre óleos, o que simplemente no haya otra vida;  siendo posible que reencarne en un gusano, que muera en este preciso segundo, o que involuntariamente, de un segundo a otro, pase a estar atrapada en mi cuerpo, aquí y ahora, pinto. No me perdonaría no pintar. Y lo maravilloso de todo esto es que, sumado al sentimiento de obligación y deber, están las inmensas e indescriptibles ganas de pintar.
Pinto también porque en el mundo no hay demasiados pintores y nunca me ha gustado hacer lo que hacen demasiados; podrìa afirmar que elegì este oficio dada mi tendencia a tomar los caminos menos transitados...  a mi terquedad. Además me es imposible mirar sin mis ojos de pintor (no digo “pintora” porque un pintor es universal y ajeno a cuestiones de género).

Después de pensarlo mucho he concluido ademàs que la pintura es inofensiva, y fuese cual fuese mi labor, siempre supe que me inclinarìa hacia la paz (sólo me permito la violencia cuando es imaginaria y secreta). Siendo  la pintura inofensiva, puede criticársele lo inútil, lo socialmente pasiva que es. Sin embargo, la inutilidad también tiene su utilidad, y es la inutilidad en si misma. No todo debe servir. Hace falta el sin sentido, tanto como las ilusiones y los sueños. La belleza sin ton ni son (o si se quiere la fealdad sin ton ni son). Hay pocos pintores porque hay pocos dispuestos a lidiar con el reproche de una sociedad obsesionada con la utilidad, con la competencia, con títulos universitarios, altos y bajos rangos  y certificados para todo (con "titulitis” como dice mi amigo pintor Graciano).La utilidad como la inutilidad son igualmente útiles.
Mis òleos y mi mate, compañeros de labor (fotografìa marzo 2011)
Es infinitamente satisfactorio dar vida a algo que en su origen era sólo un pensamiento del que nadie más que uno mismo podía ser testigo. Eso es un milagro del que sólo Dios puede ser causante. Las personas disponemos de milagrosos recursos para hacer evidentes las etéreas realidades que llevamos dentro, y he ahí nuestra riqueza. Haciendo uso de esta facultad, tambièn pinto para compartir estos secretos con las personas que quiero; y en especial con mi esposo, quien logra acrecentar cada dìa mi amor por la pintura, a travès de su amor.
Otras veces pinto para vencer mi melancolía o para evitar pensar. Hay días en que para ser dichosa me hace falta llevar la cabeza vacía (para todos, la lucidez y la inteligencia es una bendición, algunas veces, dolorosa). Y en otras ocasiones para aminorar un poco el vertiginoso cauce de alegrìa que derramo por todos lados.
Pinto finalmente porque quiero pintar, y si hay una enseñanza que me quedó grabada desde niña, esa es que siempre debía hacer lo que yo quisiera hacer. Y en eso estoy. Opté por ser feliz, sea ese un fin socialmente aceptado o no. Es ingenuo e infantil, pero es mi fin

lunes, 28 de febrero de 2011

Taller de pintura 2011

Desde Marzo recomienza el taller de pintura al òleo. Este año las clases tendràn un valor de $25.000 pesos, correspondientes a 4 clases de dos horas cada una. Como siempre los alumnos deben traer sus materiales (òleos, pinceles, aguarràs, paleta, paños de limpieza y soporte) y yo les proporciono un atril para trabajar. Los horarios disponibles para fijar las dos horas de cada clase seràn los dìas martes y jueves, desde las 3 pm a las 7 pm. Quienes tengan preguntas pueden escribirme a claudi_capri@hotmail.com
Les saluda atentamente,
Claudia